Volver del trabajo o de la universidad en bicicleta eléctrica ya se ha convertido para una gran mayoría en parte de su rutina. Y es que ya son muchos los que han optado por una movilidad urbana más sostenible. Las cifras lo demuestran.

La venta de estos vehículos se ha disparado en este último año batiendo un récord en nuestro país, como así indica un informe reciente del sector de la bicicleta de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España, en colaboración con Cofidis. Nunca se habían vendido tantas bicis como hasta ahora.

En 2020 se vendieron más de 1,5 millones de bicicletas, un incremento del 24,10% en comparación con el año anterior. La mountain bike sigue siendo la estrella y la más demandada por los consumidores, sin embargo, han sido las bicis eléctricas y los modelos urbanos los que más se han visto incrementadas sus ventas, un 48,9% y un 46,4% respectivamente.

El éxito de las bicis eléctricas

¿Merece la pena invertir en una bicicleta eléctrica?

La buena acogida de este vehículo se debe a diferentes factores…:

  • Más ecológico: Cada vez nos preocupa más el medio ambiente y así lo ampara una nueva encuesta de Oracle, a través de su división de Utilities, que muestra que “los consumidores españoles están ansiosos por volverse ecológicos”. El 58% de los encuestados asegura que combatir el cambio climático es una cuestión para ellos importante a nivel personal y el 59% es consciente de la importancia de reducir la contaminación del aire.

La bici eléctrica es sin duda una muy buena opción para cuidar el planeta, ya que reduce a cero las emisiones de CO2 y disminuyendo de manera considerable nuestra huella de carbono. Se trata de un gran respiro de oxígeno para las grandes urbes en las que hasta ahora sólo se veían coches (y no precisamente eléctricos).

  • Más económico: Comprar una bicicleta eléctrica está al alcance de prácticamente todos los bolsillos. Atrás quedó aquello de ahorrar años para tener un coche. Y sin contar además que apenas supone un coste su mantenimiento. E incluso si echamos cuentas nos saldría más barato que usar el metro o el bus.
  • Más cómodo: Dicen que montar en bicicleta nunca se olvida y ese es prácticamente el único requisito que necesitamos para hacernos con una. Y más si hablamos de una con asistencia al pedaleo, ya que si te cansas, sólo tienes que activar esa funcionalidad y el vehículo pedaleará por ti. Su velocidad máxima alcanza los 25 kilómetros por hora, superando a cualquier coche en hora punta en Madrid. Aprovéchate de los carriles bici.

Y si te preguntas acerca de su carga, te damos la buena noticia de que los ciclos de carga se han reducido considerablemente en los últimos años permitiéndonos una mayor autonomía de su motor eléctrico (y por ende, trayectos más largos).

  • Más saludable: Y si hablamos de salud, no hay opción de transporte más saludable que la bicicleta. ¡Podríamos hablar durante horas de la infinidad de beneficios que nos aporta el pedaleo! Entre otros, te ayudará a reducir el temido colesterol malo, fortalece la espalda, tonifica los músculos de las piernas y reduce la probabilidad de sufrir diabetes. Y aunque te parezca sorprendente, también activa la hormona de la felicidad y reduce nuestro nivel de estrés y malestar.

En el sector de la logística también somos muy fans de este medio de transporte. En los últimos años se utiliza cada vez más la bicicleta eléctrica como una opción sostenible para el reparto en última milla. Reducir nuestra huella de carbono y contaminar menos es la principal razón por la que empresas como Ontime ya estamos integrándola a nuestra flota como un vehículo más.

Y si además se trata de grandes ciudades donde hay restricciones de entradas y salidas de vehículos o es complicado la carga y descarga, la bicicleta eléctrica puede ser nuestra mayor aliada. ¡En Ontime damos fe!

Si ya te hemos convencido, ¡hazte con la tuya! (¡Y aprovecha las rebajas!).

¡Qué vivan las bicicletas eléctricas de alta potencia!